Con ocasión de la Jornada Mundial de la Oración por el Cuidado de la Creación, diversas organizaciones junto a la Orden Franciscana se reunieron en el Templo de la Alameda, para reverenciar e invocar a la divinidad y reafirmar el compromiso con el cuidado de la Tierra.
“Nos hemos convocado y reunido aquí, en el interior de este convento centenario, territorio donde conviven naturaleza, memorias, historias y venerables reliquias que testimonian las vivencias de otras generaciones. Hacemos un profundo silencio en nuestro interior, para sentir esta presencia, escuchar su aliento, percibir sus latidos, conmovernos con las manifestaciones de su benevolencia, sabiduría y amor”, es parte de lo que se pudo escuchar al inicio de la celebración en el Templo Franciscano de la Alameda.
La Oficina Franciscana de Justicia, Paz e Integridad de la Creación (JPIC), la Coalición Ecuménica por el Cuidado de la Creación y el Museo Arte Colonial San Francisco, fueron las entidades convocantes a este signo de amor y respeto por la Tierra y que, de paso, manifestó su rechazo al proyecto minero-portuario Dominga en el norte de nuestro país y llamó a los Constituyentes a proponer y estudiar un “Constitución Ecológica” para Chile.
Sobre esto último, Rogelio Correa, de la Coalición Ecuménica por el Cuidado de la Creación, sostuvo que este anhelo nace de la escucha de mucha gente a lo largo de Chile: “Anhelamos y es una lucha de mucha gente, que la Constitución reconozca la naturaleza como sujeto de derecho, como existe en Ecuador y Bolivia de manera que también todos reconozcamos que son bienes y no recursos y que son de todos y que todos debemos cuidarlos, restaurarlos y que no son infinitos como para consumirlos y depredarlos como lo ha hecho la minería, las grandes empresas y nosotros mismos con nuestros hábitos de consumo y de trato a la naturaleza”.
Parte del signo celebrado, contempló, además, una danza comunitaria ecuménica y una oración a los puntos cardinales y una invocación a las siete direcciones para reconectarse con la sabiduría y el espíritu de los pueblos originarios en América y así, unirse al viento que anuncia cambios, el amor que sana, las aguas del ser, la Tierra desde donde todo emerge, donde todo regresa y hacia las otras dimensiones del Cosmos.
Inés Pérez, de la Comunidad de Base Oscar Romero Sur Austral, precisó que “estos espacios tienen que ver con denunciar los abusos que se hacen de parte nuestra como humanidad a la Tierra sufriente en este minuto, pero también de los sistemas políticos y económicos que oprimen a las personas para que podamos llegar a hacer todo esto. O sea, la gente que es minera y que trabaja en las minas no son las culpables de que exista la extracción, pues la extracción es una política de depredación de la Tierra sin importar nada. Entonces, nosotros trabajamos en denunciar ese tipo de abusos sistémicos, de poderío respecto de otros. Los pobres somos pobres y tenemos que trabajar y hacer lo que podamos en esto, pero también tenemos que poner límites para que podamos seguir cuidando la Tierra”, clamó.
Todo culmino con un círculo silencioso a las afueras del Templo de la Alameda que reforzó este llamado a rechazar el proyecto Dominga y todo lo que dañe y aleje al cuidado de la Creación. “En este tiempo, a causa de la pandemia, se ha perdido la visibilidad de la urgencia que tenemos precisamente de lo que es y lo que estamos viviendo hoy con esta crisis ambiental. De verdad, estamos en momentos bien complejos si no hacemos o actuamos adecuadamente y con urgencia. Ya no es una emergencia, es una urgencia que tenemos”, detalló el Hermano Máximo Cavieres, delegado Provincial de JPIC en Chile.
Agregó, que proyectos como el de Dominga, “no ayudan a mejorar esta situación que estamos padeciendo. No necesitamos mucha explicación, la crisis hídrica que estamos viviendo y la escasez de lluvia, está colocando en una problemática bien grande a la naturaleza y nos da afectar a todos, en cuanto a la alimentación y a llevar una vida mejor. Por eso este acto, nos permite llamar la atención e invitar a tomar mayor conciencia a todo el mundo, pero de manera especial, a las autoridades, sobre todo en este tiempo que tenemos una oportunidad para que, en nuestra Constitución, estos temas estén presentes”, reflexionó.