Tómese un momento para leer la declaración conjunta de los líderes de las seis Provincias Franciscanas de Frailes Menores en los EE.UU. en respuesta al ataque al Capitolio de los EE.UU. el 6 de enero de 2021
(Extracto de la carta dirigida a los frailes estadounidenses del 7 de enero de 2021)
…Nosotros, los frailes franciscanos, estamos llamados a vivir el Evangelio de Jesucristo siguiendo el ejemplo de San Francisco de Asís. Hemos existido por más de 800 años en múltiples países de todo el mundo. Actualmente somos casi 900 viviendo en los Estados Unidos de América. Como hermanos, estamos comprometidos a ser instrumentos de paz y reconciliación para todas nuestras hermanas y hermanos en el mundo. Como ciudadanos de los Estados Unidos, apreciamos los valores democráticos que nuestra nación ha tratado de vivir desde su fundación.
Nuestras creencias y nuestros ideales no nos ciegan a lo que se experimenta a diario en nuestro país. Somos conscientes de las profundas divisiones que han surgido entre grupos que tienen ideologías políticas divergentes, tienen un estatus financiero diferente y tienen diferentes herencias raciales, étnicas y religiosas.
El ataque deliberado del 6 de enero de 2021 contra el edificio del Capitolio de los Estados Unidos se remonta a todas estas divisiones. Lamentablemente, este asalto fue un rechazo directo a los valores democráticos que han mantenido a nuestra nación unida durante más de 240 años.
Como ciudadanos, estamos enojados y entristecidos por las acciones de quienes promovieron y perpetraron este mal. La justicia exige responsabilidad para aquellos que han rechazado la «transición pacífica del poder» que es exigida por la Constitución de los Estados Unidos de América. La lista de infractores en esta acción ilegal aún no se conoce completamente, pero no hay duda de que las palabras y los «tweets» del presidente Trump fueron responsables de incitar a sus partidarios a violar la ley y participar en comportamientos violentos y agitados.
Los funcionarios gubernamentales responsables deben actuar ahora de manera legal y no partidista para restaurar el estado de derecho haciendo que los culpables rindan cuentas y ofreciéndoles la oportunidad de enmendar sus caminos.
Como hermanos, nos comprometemos a trabajar con todos los que promueven la dignidad humana, el bien común y el diálogo pacífico y respetuoso. Rechazamos la violencia como medio para lograr un fin deseado y queremos promover medios no violentos para restaurar la justicia. Rezaremos por todos nuestros funcionarios del gobierno, especialmente por el presidente electo Biden, para que trabajen juntos para sanar las heridas dentro de nuestro país.
«Nuestras heridas» no son sólo políticas. Lamentablemente, como nación, estamos en medio de una pandemia mundial. Este también es un tema urgente que enfrenta a nuestros líderes gubernamentales. Hacemos un llamamiento a todas las personas de buena voluntad en todas partes para que se unan en la oración y en la acción que ayudará a erradicar la pandemia para que las personas en los Estados Unidos y en todo el mundo puedan experimentar una vez más la bondad y el gozo originales que el Señor nos ha llamado a conocer y amar.
Provincia de la Asunción de la Santísima Virgen María: Fr. James Gannon, OFM
Provincia del Santo Nombre: Fr. Kevin Mullen, OFM
Provincia de Nuestra Señora de Guadalupe: Fr. Ronald Walters, OFM
Provincia del Sagrado Corazón: Fr. Thomas Nairn, OFM
Provincia de Santa Bárbara: Fr. David Gaa, OFM
Provincia de San Juan Bautista: Fr. Mark Soehner, OFM
Paz y bien en el Señor hermanos. Recuerdo hace unos años aquellas imágenes de hermanos Franciscanos de la O.F.M esposados por la policía por defender derechos fundamentales y humanos. Esperemos que esto no vuelva a suceder por querer hacer justicia con los más necesitados en EE.UU. No se si en estos hechos violentos hacia el nuevo presidente tiene que ver que es el segundo presidente católico después de J.F.K y de lo que nadie esta hablando, pues son nuestros valores cristianos los que aquí exponemos. Se pudieron ver en ese hecho violento de la toma del capitolio, signos del paganismo más radical, con simbologías de otros tiempos y que no son propias de estados solidarios y fraternos. Esperemos que se llegue a la paz social, pediremos a Dios por esto con oraciones. Que Dios os bendiga hermanos por vuestro compromiso y vuestra valentía y como decía San Francisco…Salud y paz.